Prácticamente, todas y cada una de las acciones que realizamos en el hogar conllevan un coste energético: desde poner el lavavajillas a aclimatar la casa. Por eso, queremos ofrecerte toda una serie de pautas a modo de recomendación para que puedas ahorrar y contribuir a disminuir el impacto de tu actividad en el medioambiente. Quince consejos para aplicar en tu día a día:
- Antes de comprar o utilizar cualquier aparato, piensa primero si es necesario.
- Si necesitas un electrodoméstico, es mejor comprar los de Clase A, que favorecen al máximo el ahorro, la eficiencia energética y la protección medioambiental.
- Cuando utilices el frigorífico, mantén la refrigeración a 5º y la congelación a -18º, limpia la parte trasera una vez al año, abre la puerta lo menos posible y no metas alimentos calientes en el refrigerador.
- Cuando utilices la lavadora, siempre que sea posible, lava con agua fría o a bajas temperaturas, aprovecha al máximo la carga o lava en programas de media carga, y aprovecha el sol para secar la ropa.
- Si utilizas horno, ten en cuenta que el horno a gas es el más eficiente. Abre la puerta solo cuando sea necesario y apágalo un tiempo antes de la cocción.
- Las bombillas compactas de bajo consumo pueden ahorrar hasta un 80% de energía. Aunque antes debes pensar si se puede aprovechar la luz natural.
- Es recomendable apagar los televisores, los ordenadores y los equipos de música cuando no se van a utilizar. Si se dejan en stand by o con el piloto rojo encendido, siguen consumiendo energía.
- Es necesario apagar el cargador del móvil una vez que ha finalizado la carga. Si se deja enchugado, sigue consumiendo energía.
- Es recomendable aislar la vivienda con ventanas o cristales dobles para no derrochar energía.
- Los mejores sistemas para la calefacción o el agua caliente son el solar, biogás, biomasa, butano o gas natural.
- Es recomendable mantener la casa entre 18 - 20º en invierno y no abrir las ventanas con la calefacción encendida.
- Durante la noche es recomendable apagar la calefacción y dejar las persianas y las cortinas cerradas para evitar pérdidas de calor.
- Siempre que se pueda escoger, es preferible utilizar un ventilador de techo que el aire acondicionado.
- En verano, durante el día, para mantener la casa a una temperatura adecuada, es mejor bajar un poco las persianas y dejar las cortinas cerradas.
- Una buena manera de ahorrar energía es ahorrar agua.